¿Es un pájaro? ¿Es un avión? ¡Es el Aula de Superpoderes!
¿Te has parado alguna vez a pensar en qué significa ser normal? “A mí no me gusta ese término, porque me hace sentir que no soy igual a los demás, y yo puedo hacer lo mismo que cualquier otra persona” comentaba un niño con autismo en un programa de televisión.
Y es que la normalidad en las aulas tiene diferentes dimensiones. Lo normal es pasarlo bien en el recreo, estudiar con tus amigos o repasar a última hora antes de un examen. Y, si no hay “Aulas Normales”, ¿por qué hay “Aulas Especiales”?
“Desde el principio intentamos alejarnos de la etiqueta de Aula de Educación Especial” explica Rodrigo Martínez, el director de Escuelas Nieto. “Hacía que los niños y niñas que la utilizan se sintieran distintos. Y es que se trata, más bien, de un Aula de Integración. La mayoría de centros ordinarios disponemos de un espacio para ello, con un pedagogo encargado de atender a los niños que tienen algún tipo de necesidad, ya sea enmarcada en algún tipo de trastorno o no, e integrarlos a todos en igualdad de condiciones”.
Con esa premisa en mente, en Escuelas Nieto decidieron dar un paso más allá y convertir el Aula de Integración en un lugar donde dar rienda suelta a sus poderes.
“Ellos están en sus clases de referencia y van allí cuando lo necesitan”
Sí, has leído bien, y es que Eliseo Alonso, el superprofesor encargado de esa clase, tiene muy claro cómo funciona: “Esta no es un aula común, estamos seguros de que cada alumno es un superhéroe en potencia, y este es un lugar donde descubrimos y activamos las habilidades escondidas de cada uno: el Aula de Superpoderes”.
“Ellos están en sus clases de referencia y van allí cuando lo necesitan, cuando hay algún trabajo extraordinario o buscan apoyo a nivel lenguaje, matemáticas… de lo que sea” continúa Rodrigo Martínez.
Y es que incluso los superhéroes necesitan entrenamiento y orientación. “Mi labor es estar aquí para ayudarlos a desarrollar sus habilidades académicas y alcanzar metas. Despegar hacia el éxito, hasta el infinito y más allá”.
El mobiliario del aula es particular. Tiene una parte con hierba artificial y espacios naturales, con distintos murales y zonas diferenciadas según el uso:_una canasta para jugar, un puf para sentarse a descansar e incluso una pequeña casita para meterse dentro cuando quieres estar solo. “Los superpoderes surgen por ese motivo, porque no es un aula convencional. Es un aula para hacer todo tipo de actividades más allá de las clases.”
Este curso, además, ponen en funcionamiento un correo, donde cada alumno puede hacer sugerencias, hablar de sus inquietudes o simplemente encontrar a alguien que le escuche (“Bueno, en este caso, que te lea” ríe Elíseo).
La fortaleza del pensamiento postitivo
Tendemos a centrarnos en nuestras carencias en lugar disfrutar de aquello que nos hace sentirnos bien en el colegio. Venimos a aprender pero, ¿venimos también a ser felices?
“En nuestro colegio participamos en este proyecto diseñado en Zaragoza hace diez años, formándonos y llevándolo a la práctica en el centro” explican desde Escuelas Nieto. “Se trata de las Aulas Felices.”
Estas se encuentran dentro de una tendencia pedagógica basada en la psicología positiva, y el mindfulness, que se aplican en las clases (transversales, en todos los cursos) para enseñar a los niños a potenciar al máximo su talento personal, logrando así su felicidad, tanto a corto como a largo plazo.
“Nosotros trabajamos las 24 fortalezas de la psicología positiva. Las encajamos en la parte curricular y desarrollamos, por ejemplo: gratitud, coraje, amor, autocontrol… Desde infantil hasta bachillerato, con proyectos adaptados a cada etapa.”
En este trimestre, terminan, están trabajando la solidaridad, y para ello están preparando un mercadillo en el que los beneficios se destinarán a Bicos de Papel, la asociación de ayuda a los Niños Oncológicos del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo.
Son los propios estudiantes los que prepararán los objetos a la venta en el mercadillo: “No vale traer nada ya hecho, ni de segunda mano”. Y es que la creatividad es también un superpoder.
Fuente: Faro de Vigo