El proceso de admisión para el curso 2023-2024 implantará medidas contra la segregación escolar
La viceconsejera de Educación Begoña Pedrosa ha presentado esta mañana, en rueda de prensa, las nuevas medidas puestas en marcha por el Departamento de Educación en el proceso de admisión (o proceso de matriculación) para el curso 2023-2024. Junto a la viceconsejera han comparecido también el director de Centros y Planificación, Eugenio Jiménez, y el director del ISEI-IVEI (Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa), Eduardo Ubieta. En dicho proceso que arrancará en febrero de 2023, tanto la planificación de la oferta como los mecanismos que regulan la admisión contribuirán a distribuir equilibradamente la diversidad y la vulnerabilidad entre todos los centros sufragados con fondos públicos.
Antes de explicar las medidas y novedades que se pondrán en marcha, sin embargo, la viceconsejera Pedrosa ha querido aclarar en qué consiste la segregación escolar. Segregación escolar es la distribución desigual del alumnado en centros escolares por razón de sus características personales, sociales, culturales, económicas o por su origen. Esa distribución no coincide, en términos estadísticos, con la composición socioeconómica y cultural de la población del área en la que se encuentran dichos alumnos y alumnas y, por ende, genera situaciones de desigualdad.
Numerosos estudios realizados en torno a esta cuestión han puesto de manifiesto los efectos de la segregación en el ámbito escolar y entre el alumnado como, por ejemplo, menos oportunidades para estudiar, menor equidad social, menor cohesión social o menor movilidad social.
De igual manera, la viceconsejera ha recordado que desde el Departamento de Educación se han impulsado diversas medidas para poder responder desde los propios centros a la situación del alumnado más vulnerable: incremento de recursos personales en centros de alta de la complejidad educativa, desarrollo de diagnósticos y diseño de proyectos estratégicos para responder a la diversidad del alumnado en centros de alta complejidad educativa (Eraldatzen), o el incremento de profesionales para facilitar el acceso lingüístico al alumnado recién llegado (EUSLE).
Aparte de estas medidas de respuesta, se ha realizado un diagnóstico específico de la situación de la segregación en las zonas y centros educativos contando con la experiencia de un equipo de profesores de la Universidad Autónoma de Barcelona quien ha prestado asesoramiento al Departamento de Educación para desarrollar las claves de la política más conveniente para el caso de Euskadi. En él se recoge que, además de las propuestas de intervención en centros en situaciones importantes de vulnerabilidad educativa, es necesario tomar algunas medidas que posibiliten limitar la segregación escolar desde el acceso al propio sistema educativo.
Desde esta perspectiva para disminuir de forma eficaz la segregación, el Departamento de Educación ha optado por una doble vía:
- Modificar el proceso de admisión.
- Ajustar el procedimiento de matrícula viva.
En sesiones llevadas a cabo los días 15 y 16 de diciembre, el Departamento de Educación explicó ya los pormenores de las nuevas medidas del proceso de admisión para el curso 2023-2024 a las direcciones de todos los centros de Educación Infantil y Primaria de Euskadi.
El planteamiento global se basa en el desarrollo de un proceso que, comenzando desde la entrada a las aulas de 2 años, vaya, curso a curso y de manera progresiva, extendiéndose a lo largo de todo el sistema educativo; de forma que en ningún caso se plantee que el alumnado actualmente escolarizado en un centro tenga que moverse a otro.
Novedades principales del proceso de admisión
El nuevo procedimiento apuesta por distribuir al alumnado de forma equilibrada, desde su ingreso en Educación Infantil (aulas de 2 años). Los cambios principales introducidos en el procedimiento son:
- Planificación de la oferta en el nivel de entrada a Educación Infantil (2 años). El criterio fundamental aplicado en el proceso de admisión en lo concerniente al número de plazas ofertado en cada centro será evitar la infraoferta y la sobreoferta. De entrada, todos los centros podrán ofertar todas sus plazas disponibles y planificadas.
- Reserva de plazas: todos los centros sufragados con fondos públicos deberán reservar un número de plazas para el alumnado vulnerable, número que será determinado por el Departamento de Educación. Esta reserva de plazas se establecerá una vez recibidas las solicitudes durante el plazo de inscripciones. La medida busca una distribución equilibrada de la diversidad y de la vulnerabilidad entre todos los centros del Servicio Público Vasco de Educación, a fin de evitar la segregación del alumnado por razones socioeconómicas o de otra naturaleza. El porcentaje de reservas será el mismo para todos los centros de la misma área de influencia.
- Al efecto, se crea un Índice de Vulnerabilidad. A cada centro se le determinará un índice de vulnerabilidad referencial, que como referencia será el mismo para todos los centros del área de influencia. Al presentar sus solicitudes, las familias cumplimentarán una encuesta sobre su situación socioeconómica. Sobre la base de la información recabada, se delimitará el índice de vulnerabilidad y se determinará qué alumnas y alumnos son considerados vulnerables y quiénes no. Así, se definirá el nivel referencial de cada zona, con el número de plazas que habrá que reservar para alumnado vulnerable en cada centro. El Departamento de Educación definirá de oficio la reserva para cada centro. Objetivo: que todos los centros de un área de influencia se acerquen al índice de vulnerabilidad correspondiente a su área.
- También se ha realizado un ajuste de la zonificación, en Educación Infantil y Educación Primaria, para posibilitar un efecto real de las medidas establecidas. Por ejemplo, en los grandes municipios, salvo las capitales, se ha pasado de tener varias áreas de influencia a una sola área. En todas las áreas de influencia hay algún centro público.
- Escolarización de proximidad. Uno de los cambios más significativos introducidos en los criterios de baremo es la puntuación asignada por proximidad del domicilio al centro. La puntuación máxima para el baremo se puede obtener en el caso de que el centro solicitado sea el centro (público o concertado) más cercano al domicilio del alumno o alumna, con 7 puntos. Cualquier otro centro en el área de influencia en la que se encuentre el domicilio –pero no el más cercano– obtendrá 5 puntos. Se trata de una medida que premia la proximidad incluso dentro de una misma área de influencia, con el objetivo de fomentar una escolarización de proximidad (hasta ahora, el domicilio en área de influencia daba 6 puntos).
- No limitación en la selección de centros por las familias. Cada familia podrá seleccionar para la escolarización de sus hijos o hijas todos los centros de su área de influencia, o de otras áreas, limítrofes o no, que reúnan las condiciones educativas que ellos consideren adecuadas a sus planteamientos personales, priorizándolos en función de sus intereses. El proceso de admisión tratará de ofertar a cada alumna y alumno el centro priorizado por las familias, y solo en el caso de que en ninguno de los seleccionados hubiera posibilidad de escolarización se ofertaría otro centro que, reuniendo las características marcadas, sea próximo al domicilio del alumno o alumna. Por este motivo, es muy importante que las familias seleccionen el mayor número de centros posible, de forma que el que les corresponda se adecúe lo más posible a sus intereses.
Como puede observarse se trata de un procedimiento que trata de conjugar el interés de las familias en la matriculación con el del propio sistema educativo de construir un sistema más equitativo y menos segregador.
Procedimiento de matrícula viva: criterios
Los criterios y principios empleados en el proceso de matriculación, se hacen extensivos a la matricula viva, es decir, aquella que se da con el curso iniciado y fuera del proceso oficial de matriculación. Por ello, la distribución equilibrada de la diversidad y de la vulnerabilidad entre los centros también será el criterio principal en estos casos, con el objeto de promover la escolarización inclusiva. También se tendrá en cuenta la proximidad entre centro y domicilio familiar.
A partir de esta orden, todas las matrículas que no se realicen en el periodo de matriculación ordinaria deberán realizarse a través del aplicativo del Departamento de Educación, para velar por la igualdad de oportunidades en el acceso a los centros educativos.
El Departamento de Educación publicará en breve la Orden que regula el proceso de admisión para el curso 2023-2024 y define el calendario de dicho proceso. Esta norma recoge las novedades introducidas en el Decreto modificado recientemente por el Departamento (Decreto sobre la Admisión y la Escolarización del Alumnado, publicado en el BOPV de 14 de noviembre), con el objetivo de promover la distribución equilibrada de la diversidad y de la vulnerabilidad entre los centros escolares sufragados con fondos públicos. Asimismo, se publicará la Orden que regula el procedimiento de matrícula viva.