Galicia reforzará la educación de adultos con una nueva ley para impulsar el acceso desde el rural y la conciliación con la vida laboral y familiar
Rueda reconoció que la matrícula en el sistema de enseñanzas para adultos de Galicia experimentó un descenso “en los últimos años” debido a dos motivos. “Por la necesidad de actualizar estas enseñanzas y también por el descenso a mínimos históricos del abandono escolar que pasó del 25,8% en el 2009 al 8%”, indicó Rueda.
La futura ley tiene como objetivo último atender particularmente los grupos sociales más desfavorecidos, con baja cualificación profesional o en riesgo de exclusión social. Asimismo, y para atender a las personas residentes en el ámbito rural, trata de potenciar de manera singular las modalidades de aprendizaje a distancia y favorecer al mismo tiempo la conciliación con la vida familiar y laboral de los ciudadanos. “Era necesario regular y facilitar a aquellas personas que quieren continuar con su formación poder hacerlo de forma online o semipresencial porque en la anterior normativa era casi al 100% presencial”, indicó Rueda, que aclaró que la nueva ley también promoverá el diseño de itinerarios flexibles de aprendizaje, adaptados a las necesidades de cada persona, específicos, además, en el caso de las personas privadas de libertad.
Para eso, las principales acciones pasan por la elaboración de un Plan del sistema gallego para el aprendizaje a lo largo de la vida adulta, con el fin de concretar las acciones para lograr los objetivos normativos, y por la creación del Instituto gallego para el aprendizaje a lo largo de la vida adulta como centro de referencia para homogeneizar estas enseñanzas.
Enseñanzas que se incluyen
El texto normativo acerca las definiciones más destacadas sobre el ámbito de la formación de las personas adultas, como las de competencias básicas y profesionales o la de programas de formación e integración en competencias lingüísticas, de mejora de las competencias clave y de los orientados a potenciar el envejecimiento activo y saludable.
Asimismo, define como oferta formativa para las personas adultas la constituida por las enseñanzas académicas no universitarias (básicas iniciales, la educación secundaria obligatoria, el bachillerato y la preparación para las pruebas de obtención de títulos), la FP para adultos, las enseñanzas de régimen especial (idiomas, artísticas y deportivas, las no regladas (formación en competencias digitales, las enseñanzas de castellano y gallego y de los elementos básicos de la cultura para la integración de las personas inmigrantes) y los cursos en línea abiertos.
Todas ellas quedarán recogidas en el Plan del sistema gallego para el aprendizaje a lo largo de la vida adulta, que concretará las acciones que hace falta llevar a cabo para lograr los objetivos de esta ley, partiendo de la diagnosis de las necesidades y demandas de la sociedad. En este sentido, hace falta señalar que en los últimos años se viene experimentando una considerable caída de la matrícula en las enseñanzas para adultos, tanto por la merma del abandono educativo al mínimo histórico del 8,1% (frente al 25,8% del año 2009), como por la necesidad de replantear a hacer más atractivas las enseñanzas de adultos.
Igualdad de oportunidades
El Instituto gallego para el aprendizaje a lo largo de la vida adulta, que se creará al amparo de este texto formativo, será el centro de referencia para homogeneizar estas enseñanzas. Se ocupará de desarrollar acciones formativas por medios telemáticos, promover nuevas metodologías de aprendizaje y, en general, impulsar la enseñanza a distancia para garantizar la igualdad de oportunidades y facilitar la conciliación y el acceso a los recursos desde cualquiera parte del territorio.
En este sentido, se encargará del diseño y elaboración de un catálogo de recursos digitales, disponibles en línea, que incluye todos los materiales didácticos precisos para seguir la oferta formativa que esté disponible en la modalidad a distancia.
El texto normativo prevé, además, que todo el proceso de formación a lo largo de la vida esté apoyado por los servicios de orientaciones, de tal forma que la ciudadanía pueda determinar, en cualquier momento de su vida, sus capacidades, competencias e intereses, tomar decisiones en materia de educación, formación y empleo, gestionar el recorrido de aprendizaje, esencial para el desarrollo personal, la evolución profesional y la integración social, y avanzar en términos de equidad e inclusión social.
Contexto europeo
El anteproyecto de ley se encuadra en el contexto de la Agenda de Capacidades Europea, que considera que el aprendizaje a lo largo de la vida debe ser la norma de la sociedad actual, y en la Resolución del Consejo de la Unión Europea sobre un nuevo Plan europeo de aprendizaje de personas adultas 2021-2030. Establece como objetivo general aumentar y mejorar la oferta, promoción y aceptación de las oportunidades formales, no formales e informales de aprendizaje para todas las personas.