Precariedad y Cohesión Social
Seis años de crisis y hoy, en España, las personas que no padecen ningún problema de exclusión social se han convertido en una estricta minoría. La fractura social entre aquellos que se encuentran en la franja de integración, dentro de la estructura social de nuestro país, y los que se encuentran en situación de exclusión se amplía. Entre ambos grupos, unas clases medias que, según nos indican todos los datos, decrecen y transitan, parte de las mismas, hacia los espacios de la exclusión. Estos son los primeros resultados
que la encuesta realizada por la Fundación FOESSA en 2013 ha comenzado a proporcionar.
El espacio de la exclusión se ensancha, y el factor económico ya no es suficiente para explicar el deterioro de las condiciones de vida de los ciudadanos. A una somera descripción de la situación intentará dar respuesta el primer capítulo de este informe, profundizando en los indicadores generales de contexto, junto con las primeras conclusiones de la encuesta FOESSA. Existe un gran riesgo de que el aumento progresivo de la desigualdad, en el largo plazo, se convierta en crónico. Este es uno de los problemas a los que debemos hacer frente sin dilación. La reforma fiscal que se anuncia debería contemplar los mecanismos suficientes que no solo contengan la desigualdad, sino que la hagan retroceder. Los datos más recientes nos hacen tener una gran preocupación por el desplazamiento que se está produciendo entre los grandes grupos de renta en nuestro país.