Guía de Recursos de 1º y 2º de Primaria
El término competencia se viene empleando habitualmente con tres significados distintos:
El primer significado se relaciona con «rivalizar con», que se usa especialmente en el ámbito del deporte. Por ejemplo: «En esa competencia, el atleta alemán ha sido el mejor».
El segundo significado habitual se relaciona con «pertenecer a» o «incumbir», que se utiliza habitualmente en el ambiente laboral y profesional. Por ejemplo: «El cuidado del mobiliario es de su competencia».
Y por último, tiene un tercer significado que se relaciona con «ser apto» para realizar una determinada actividad. Es decir, ser idóneo, eficiente y cualificado. Por ejemplo: «El doctor Jiménez es muy competente».
Este último significado de la palabra competencia es el que ha ganado importancia en los últimos años en el ámbito educativo. Desde esta perspectiva, adquirir una competencia (o ser competente) significa tener la capacidad de afrontar situaciones y de resolver problemas de la vida cotidiana eficientemente. El ser competente no consiste en una mera suma de saberes o habilidades y es algo más que tener la capacidad para hacer algo correctamente. Para ser competente es necesario adquirir un conjunto de saberes, habilidades y destrezas: el saber (los conocimientos), el saber hacer (las técnicas y los procedimientos) y el saber ser (los valores y las actitudes). Mediante combinaciones y dosificaciones de estos componentes, el individuo podrá enfrentarse a diversas situaciones y resolver problemas.