´Los profesores no están suficientemente formados para atender a estos estudiantes´

-¿Cuál es el protocolo a seguir en un colegio ante un niño con problemas de aprendizaje?

-Normalmente es el orientador el que se encarga de las evaluaciones de los problemas aunque para ello cuenta con el tutor del alumno o sus profesores. El problema es que para muchos casos, como en la dislexia, no hay un protocolo a seguir. Hay padres que nos comentan que determinados déficits de sus hijos no son detectados por los docentes.

-¿Falta formación entre el profesorado?

-Sí, los profesores no están suficientemente formados para atender a este tipo de alumnado. La formación de las particularidades del alumnado es una de las deudas de nuestra formación profesional. Los formadores de profesores muchas veces solo enuncian los problemas con los que se pueden encontrar, pero casi nunca practican cómo tratarlos.

-¿Existe un sobrediagnóstico de casos de niños con problemas de aprendizaje o han aumentado en los últimos años?

-Hoy se dan dos situaciones. En muchos casos no hay ningún diagnóstico porque no se conocen los síntomas o no se tienen los instrumentos para corregirlos. Reitero que hay padres que aseguran que los profesores no detectaron el problema de sus hijos. Y hay determinados casos en los que hay una hipervaloración de determinados problemas, como es el caso de la hiperactividad o el déficit de atención. Asignarle un TDAH a un niño que se muestra inquieto, muchas veces es ponerle una etiqueta sin evaluar cual es el verdadero problema que hay debajo.

-¿Cuál es el a poyo ideal para estos alumnos: clases de refuerzo, apoyo en la propia aula…?

-Cada caso es diferente. En unos casos los chicos necesitan atención personalizada y permanente por lo que deben ser tratados a parte del grupo normalizado. Otras veces el alumno puede ir a clase y solo se recurre al especialista de forma transitoria dentro del horario escolar. Si el alumno va lento en al aprendizaje conviene ponerle clases de refuerzo fuera del horario lectivo… El apoyo dentro del aula con un profesor al lado del alumno es algo prácticamente imposible por los recortes y poco recomendable pedagógicamente.

-¿Por qué desaconsejan esta medida?

-Se crea un estigma positivo porque otros alumnos también querrían que alguien les ayudara a seguir la clase y negativo, pues para la mayoría el que alguien tenga que ayudar a su compañero lo referencia como más torpe.

-¿Cómo está España y Galicia respecto a otros países en la atención a estos alumnos?

-Lo poco avanzado se está destruyendo con los recortes: más número de alumnos por clase, menos especialistas en audición y lenguaje o pedagogía terapéutica…

Fuente: La Opinión A Coruña