22 consejos para aprender fuera del aula
Educarles valores de solidaridad es esencial para cultivar su empatía social y que sean conscientes que todos vivimos dentro de una sociedad en la que colaboramos con el bienestar común.
Por Javier Peris
EMPECEMOS POR ABRIR LAMENTE Y ASUMIR QUE HAY MUCHAS FORMAS DE APRENDER. La escuela es un lugar privilegiado para la socialización y la instrucción, pero no es el único. La familia y su entorno de relaciones es, de hecho, lo más importante. Pero no se puede dejar a la improvisación todas las posibilidades de aprendizaje que existen fuera del aula y de los exámenes. Hay que proponérselo.
LAS ACTIVIDADES EXTRAESCOLARES NO PERTENECEN AL CURRÍCULO ESCOLAR y demasiadas veces se recurre a ellas como guardería y sin esperar de ellas nada valioso. Los padres deben exigir calidad de enseñanza durante esas horas, se paguen o no. La elección de la actividad puede estar condicionada, y es lógico, por el círculo de amigos del alumno, pero hay que intentar que sus contenidos se ajusten a las preferencias tanto del hijo como de los padres.
LOS IDIOMAS, Y ESPECÍFICAMENTE EL INGLÉS, ES PERCIBIDO CON RAZÓN COMO UNA COMPETENCIA IMPRESCINDIBLE PARA AFRONTAR EL FUTURO. Las tradicionales academias son un buen complemento, pero hay mucho más. Los jóvenes pueden sentirse muy motivados por seguir en versión original sus series y películas favoritas; y no digamos todo lo que tiene que ver con la música y sus intérpretes. Para los adolescentes existen plataformas en internet que convocan periódicamente tertulias en cafés y bares en inglés y otros idiomas.
LOS DEPORTES FORMAN PARTE DE LA FORMACIÓN DEL ALUMNO; no se trata sólo de diversión. Muchos niños no necesitan que se les anime a practicar un deporte, mientras a otros hay que esforzarse en ponérselo fácil y atractivo. No hay que forzarles a practicar un deporte que no les entusiasma. Hay que seguir buscando fuera de las ofertas más habituales: natación, senderismo, aerobic… La lista es mucho más larga. Hoy existen ofertas para hacer ejercicio que ni siquiera conocemos.
LOS JUEGOS SON CADA VEZ MÁS VALORADOS Y USADOS EN LA ESCUELA, Y FUERA DE ELLA TIENEN LOS MISMOS BENEFICIOS PEDAGÓGICOS. En Internet hay juegos muy divertidos e instructivos, aunque muchos tienen la pega de ser poco sociales y aún menos trasparentes. Y a los juegos clásicos de grupo como el diccionario se han unido otros sacados de formatos televisivos como Pasapalabra, Saber y Ganar… Fuera de casa está de moda el Scape Room.
MÚSICA, DANZA, TEATRO… SE TRATA DE UN OCIO CULTURAL QUE TIENE QUE GUSTAR UN POCO. El teatro, por ejemplo, es una actividad extraordinaria en muchos sentidos, pero no se puede ni se debe imponer a los jóvenes. Más allá de las ofertas tradicionales ¿por qué no montar un grupo de música? O apuntarse a un coro..
LOS PSICÓLOGOS CONOCEN BIEN EL PERFIL DEL NIÑO O JOVEN ‘ARTISTA’. INCLUSO EXISTE UNA OPCIÓN DE BACHILLERATO PARA ELLOS. No todos los padres se encuentran cómodos con que su hijo pueda decantarse por la artes plásticas, la música o la interpretación, pero participar en actividades de este tipo es la mejor forma de testar tanto el grado de motivación como la capacidad para crecer en esas disciplinas.
ENTRE TANTAS POSIBILIDADES, HAGAMOS UN DESCANSO Y APROVECHEMOS PARA PASEAR… CON NUESTROS HIJOS. Charlando con ellos podemos enseñarles mucho. No hace falta ser universitario ni tener dotes pedagógicas; la diferencia de edad es suficiente para abrirles los ojos a muchas realidades interesantes y a despertar su curiosidad por otras.
CUANDO VIAJAMOS EN FAMILIA NO SE SUELE PENSAR EN ELLO, pero un viaje supone para los niños y jóvenes el descubrimiento de lugares, personas y situaciones que nunca encontrarán en su día a día entre la escuela y el hogar. Desde el propio aeropuerto hasta el paisaje humano de la cabina del avión, y eso que todavía no hemos despegado. En los viajes podemos adoptar una actitud pasiva de progenitor sufriente o bien compartir con los pequeños nuestras pequeñas sorpresas y descubrimientos.
LA LECTURA TIENE MUCHO DE VIAJE, PERO QUIZÁ SEA ESTA LA AVENTURA A LA QUE RESULTA MÁS DIFÍCIL INVITAR A NUESTROS HIJOS. Podemos explayarnos sobre las satisfacciones que nos han dado los buenos libros, o argumentar que un libro puede resultar más apasionante y duradero que la mejor película, pero si un niño no quiere leer hay poco más que hacer. Ni siquiera el ejemplo paterno les motiva. Paciencia. El amor por la lectura tiene un poco de vocación y otro de revelación.
SALIMOS AL AIRE LIBRE. El contacto de la naturaleza tiene muchas caras y todas buenas. Comenzamos por la exploración. Vistas, olores y sensaciones que no se encuentran en el entorno conocido, casi siempre urbano. Hallaremos motivos para la curiosidad, para experimentar la pequeñez, para salirse de lo cómodo y reconocible y encontrar placer en ello.
Y PARA HACERNOS PREGUNTAS Y DESEAR RESPUESTAS. En la naturaleza nacen muchas vocaciones para la ciencia. Las excursiones y paseos pueden organizarse con más o menos detalle, pero los chicos y chicas disfrutarán más si preparamos con antelación algunas explicaciones de lo que van a ver, y que poco o nada tengan que ver con las lecciones de esa semana.
SE EN EL SENTIMENTALISMO, aunque este actúe de eficaz acicate en los más jóvenes. Los jóvenes deben ver en la belleza no sólo en el paisaje sino en los pequeños e innumerables milagros de la vida que sostienen nuestro delicado hábitat. Contemplar a un pequeño pájaro anidando en la ribera de un río hace más por el respeto de los entornos fluviales que cualquier taller en el aula.
SEGUIMOS DESCUBRIENDO COSAS EN EL CAMPO: allí crecen el arroz, las naranjas, el trigo y las legumbres a las que hacemos tan poco caso en el comedor de la escuela; allí se crían vacas, corderos, cerdos y pollos que luego rellenan bocadillos y hamburguesas… ¿No podríamos tener nuestra propia tomatera?.
NO SÓLO PARA DESCUBRIR EL CAMPO EN GRANJAS SE ORGANIZAN ACTIVIDADES DE FIN DE SEMANA. También se pueden dedicar esos días para hacer una yinkana que combine el ingenio y las pruebas deportivas, o centrar todas las actividades en un solo tema: las redes sociales, la diversidad, el medio ambiente, la música… La intensa socialización no sólo no perjudica sino que favorece la comprensión y retención de los conceptos.
LLEGA EL VERANO. Las estancias en el extranjero para aprender idiomas son muy provechosas, y no sólo por el idioma. Pero son caras y una economía media debe empezar a ahorrar unos meses antes. Además hay campamentos y cursos de temáticas muy variadas, y no necesariamente lejos de casa. ….y tres libros para saber más
DE POCAS COSAS SE LOGRA UNA ENSEÑANZA MÁS ÚTIL COMO UNA ACTIVIDAD DE VOLUNTARIADO. De todas se aprenden, incluso de pintar un local social del barrio, pero especialmente de aquellas que enfrentan a los hijos con personas y realidades que existen más allá de su zona de confort.
NUNCA ES DEMASIADO PRONTO PARA ASUMIR UNA RESPONSABILIDAD MÁS O MENOS ‘LABORAL’; con un jefe, una retribución, un horario y una tarea concreta. Aprender significa madurar, y un pequeño trabajo, de acuerdo con la edad del menor, es una escuela para la disciplina, la obediencia, la fortaleza, la relación social… Las primeras experiencias, como es lógico, se vivirán en el ámbito familiar.
EL HOGAR PROPORCIONA MUCHAS LECCIONES DIARIAS. Difícilmente se tendrá gusto por la lectura si en casa sólo se leen revistas del corazón, o aprenderán a trabajar en equipo si no han conocido el reparto de tareas domésticas. La higiene, el orden, el buen humor o la compasión no se enseñan -y a duras penas se aprenden- en la escuela.
EL LLAMADO ‘APRENDIZAJE COOPERATIVO’ AGRUPA UNAS TÉCNICAS QUE ESTÁN RESPALDADAS POR LOS HALLAZGOS DE LA NEUROCIENCIA. Aprender juntos es más productivo, además de más entretenido, y dónde mejor que en la familia para sacarle el máximo provecho. En la vida doméstica existen, innumerables ocasiones para demostrar sorpresa, curiosidad, discrepancias… ganas de saber más.
EL CÍRCULO DE AMIGOS DE LOS HIJOS ES UNA PREOCUPACIÓN HABITUAL EN LOS PADRES, pero siempre orientada a actitudes y hábitos básicos como el estudio y la disciplina. Pocas veces pensamos que los amigos son una fuente privilegiada de motivación, curiosidad y descubrimientos. En el grupo de amigos pueden descubrir aficiones y practicar actividades que no encontrarán en la escuela ni en la familia.
MENTE ABIERTA. Cerramos estos consejos como los empezamos, invitando a los padres a no limitar el concepto de aprendizaje, a no obsesionarse con el rendimiento, a desear para sus hijos un mundo interior y exterior más rico. Hoy en día la información y la instrucción son más accesibles que nunca, pero lo que sigue siendo caro -ni siquiera tiene un precio- es la motivación por saber, por descubrir, por experimentar.
Fuente: Padres y Colegios